ERP. Las lluvias que se registran entre ayer y hoy en las zonas de la sierra devuelven la esperanza a la región, sin embargo; se necesitará de mucho más que pequeñas precipitaciones para salvarnos de la situación que tenemos en frente: la más severa crisis hídrica de los últimos años en Piura.
“La ausencia de lluvias ha generado este severo stress hídrico en la región, y esperamos dos cosas; lluvias que nos recuperen el nivel de agua que necesitamos pero más importante, el buen comportamiento de los usuarios para que haga un uso adecuado del servicio de agua potable. La población quizá no ve con claridad lo que hay detrás de todo este tema porque hemos manejado el tema de forma responsable y no hemos desabastecido al pueblo, sin embargo; a partir de este punto vamos a necesitar del compromiso de todos para seguir teniendo una operación constante del servicio”, declara el gerente de la EPS Grau, Roberto Sandoval Masa.
Y en efecto, desde la Planta de Tratamiento de Agua Potable Curumuy las operaciones continúan con normalidad para abastecer de agua a Piura, Castilla y Veintiséis de Octubre. Lo mismo en la Planta de Tratamiento de Sullana que abastece a esa provincia.
En Curumuy, de los 40 a 50 metros cúbicos por segundo que pasan por el canal Daniel Escobar, la planta de tratamiento solo necesita de 1 metro cúbico, lo restante es ocupado para la agricultura. Allí el agua que capta la planta se somete a un proceso tecnológico de mezcla; floculadores hidráulicos; sedimentadores de alta eficiencia; filtros autolavantes; químicos; cloración y exámenes de laboratorio que permiten tener agua lista para el consumo humano y que la EPS Grau distribuye a las zonas de su competencia.
Consumo humano v/s consumo agrícola
La crisis hídrica se avizoraba desde hace meses en nuestra región. Sin registro de lluvias la situación agudizó y luego de probar con algunas rest4ricciones el Proyecto Especial Chira Piura decidió el pasado 02 de noviembre ejecutar un corte del agua para uso agrícola. Más de 20 días después, y en medio de una desesperación comprensible por sus cultivos y pérdidas a la vista, los agricultores reaccionaron en protesta. Lograron que se libere agua y ahora mismo hay dotación para el caudal ecológico que provee al consumo humano y para riego de cultivos.
Sin embargo; el próximo 07 de diciembre será clave. Se evaluará el agua del reservorio Poechos y se advierte que si la provisión es igual o menor a 80 mil millones de metros cúbicos habrá obligación de nuevamente cortar el agua para el sector agrícola. Solamente se abastecería a la planta de tratamiento que lleva agua potable a la población.
“Entonces comenzamos nuevamente esta ‘guerra’ por el agua. Nosotros como EPS Grau hemos tenido que resguardar y redoblar el patrullaje a lo largo de 53 kilómetros del canal Daniel Escobar porque los agricultores sustraen con cisternas, motobombas y otros mecanismos, el agua que debe llegar a la planta de tratamiento. En el último corte advertimos hasta 30 puntos de sustracción del agua. Eso la población que recibe el agua en sus casas no lo sabe, y queremos que sea consciente de ello”, apunta Roberto Sandoval.
Abastecimiento
Finalmente, la EPS Grau informó que el abastecimiento poblacional seguirá normal. Con el déficit de lluvias incluso los 23 pozos de agua subterránea también están operativos y hay 03 adicionales disponibles a entrar en funcionamiento. Por ello, insiste en que la población debe tomar en serio este problema y utilizar con inteligencia el agua en sus domicilios. “Podremos tener provisión de agua pero si no somos responsables podremos llevar al colapso esta situación. La responsabilidad la tenemos todos en casa”, acotó.
Dato:
Más de 220 mil usuarios se abastecen de agua potable en Piura metropolitana.
