Pariñas/Talara (ERP). Muchos pensionistas de la ley 19990 llegaron este martes hasta la Oficina de Normalización Previsional que atiende en nuestra ciudad los días martes y viernes para poner de conocimiento que pese a que han transcurrido 16 días, éstos aun no reciben sus montos pensionarios del mes de Noviembre.
El pasado mes de octubre los pensionistas que reciben sus dineros a domicilio fueron notificados que a partir de este mes, es decir noviembre, y en virtud a un convenio firmado entre la ONP y el banco de capitales colombianos GNB del Perú, autorizaba al último a asumir la entrega de sus importes pensionarios en lugar del Banco de la Nación quienes para este fin hacían uso de la empresa de caudales PROSEGUR.
Sin embargo, y pese a que en la notificación se dejaba en libertad a los pensionistas de continuar con el sistema esta vez a través de GNB o caso contrario hacer sus cobros directamente al Banco de la Nación, se les dio a los reclamantes como única explicación que sus dineros se encontraban ya en poder del banco GNB, quienes no cuentan con oficinas u agencias en Talara.
Los pensionistas y familiares talareños que acudieron a la ONP, además hicieron sentir su malestar por el hecho de que hay que esperarlos el lapso de 15 días ya que “cualquiera de esos días aparecen por ahí a pagar” es decir nadie puede salir de casa, habiendo transcurrido 16 días y hasta la fecha no llegan a dejarles sus dineros.
Los quejosos pensionistas se preguntan, con tanto banco privado más el Banco de la Nación que operan en Talara, tenían que hacer un convenio con el banco colombiano GNB que no tienen ni una oficina en esta ciudad, y que nadie avala máxime cuando hay una corriente de dudas en el país por la procedencia de dineros provenientes de ese país.
En el colmo del menosprecio y abuso hacia el adulto mayor, los señores de Prosegur aparecieron recién el 23 de noviembre y al negarse los pensionistas a firmar la autorización para que el banco GNB les pague, pues sencillamente no les entregaron sus pensiones diciéndoles que vayan a Piura o que esperen el otro mes, lo que ha causado hasta bajas de presión en algunos pensionistas, aparte de la indignación que ocasiona la ONP por decisiones inconsultas y que perjudican a los pensionistas.
