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Dom, Abr

Piura registra una de las cifras más altas en casos de uniones tempranas forzadas según Plan Internacional

Piura
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ERP. Las uniones tempranas forzadas de niñas y adolescentes representan una gran problemática al interior del país, ya que de acuerdo a la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar – Endes, en promedio el 28% de las mujeres unidas a nivel nacional, que ahora tienen entre 15 y 49 años iniciaron la convivencia con una pareja siendo menores de 18 años, sin necesidad de pasar por un proceso formal de registro en RENIEC.

De dicho porcentaje, Piura es considerada la segunda región del país con más casos de niñas y adolescentes que se unen tempranamente a parejas adultas (32%). Además, de acuerdo con un estudio realizado por Plan International y UNFPA, 7 de cada 10 mujeres que se unieron forzadamente entre los 10 y 15 años procedían de zonas rurales, y de entre ellas, 3 de cada 10 niñas no sabían leer ni escribir. Asimismo, en el área rural, el 90% de mujeres que se unieron entre los 10 y 15 años tuvieron su primer hijo cuando eran menores de edad.

Cabe resaltar que, si bien ha habido avances para afrontar esta problemática, como la ley N°31945 que “prohíbe el matrimonio en menores de edad”, este panorama aún revela la necesidad de tomar medidas concretas para enfrentar la problemática de las uniones tempranas y forzadas, incluyendo la implementación de políticas públicas y de programas educativos, así como el fortalecimiento de los sistemas de protección infantil, y la promoción de la igualdad de género en todos los niveles de la sociedad.

Ante este escenario, Plan International impulsa la campaña #FuturoParaEllas, una iniciativa que destaca la urgencia de abordar este problema en la agenda política nacional, contribuyendo así a prevenir y erradicar el matrimonio en menores de edad y las uniones tempranas forzadas. Asimismo, busca sensibilizar a la población sobre una realidad que está más cerca de lo que se piensa, subrayando la importancia de proteger los derechos de las niñas y adolescentes, y de garantizar su acceso a una vida libre de violencia y discriminación.

“En un contexto donde la violencia de género sigue siendo una realidad persistente, es fundamental que se redoblen los esfuerzos para proteger a las niñas y adolescentes, garantizándoles así un futuro seguro y prometedor. No olvidemos que la lucha contra las uniones tempranas forzadas es un paso crucial en el camino hacia una sociedad más justa e igualitaria para todos”, añade Veronique Henry, Directora País de Plan International.

Cifras impactantes

A nivel nacional, se han registrado más de 56 mil casos de adolescentes que se unieron forzadamente a lo largo de la Historia, siendo el 86% de estas víctimas del sexo femenino, lo cual refleja una situación alarmante que requiere una acción inmediata por parte de las autoridades y la sociedad en su conjunto.

La problemática de las uniones tempranas y forzadas tiene raíces profundas en la desigualdad de género, la pobreza, la violencia sexual, el embarazo adolescente y la falta de acceso a la educación en algunas zonas rurales y periurbanas del país. Al respecto, resulta importante mencionar que el 46% de las adolescentes unidas forzadamente a nivel nacional se ubican en el quintil inferior de pobreza, y solo 1% en el quintil superior.

“Además, el estudio nos ha evidenciado que cuanto más temprano se une una niña o adolescente, mayor riesgo tiene de sufrir violencia física no severa (37%), violencia psicológica (32%) y violencia física severa (17%)”, agrega Henry.

En ese contexto, diversos testimonios desde las voces de mujeres indígenas revelan que en pleno 2024 esta sigue siendo una realidad en las sombras, tomando en cuenta que las mujeres de origen “nativo amazónico” presentan un porcentaje de incidencias alrededor de las uniones forzadas que duplica el promedio nacional (20%), frente a las mujeres “afroperuanas” (13%) o “mestizas” (8%).

Esto se evidencia en lo expresado de Margot Chocce, lideresa indígena ayacuchana, quien afirma que “realmente nada parece haber cambiado, tal vez hasta hemos empeorado. Año a año aumentan las uniones tempranas forzadas en nuestra comunidad, y usualmente es por falta de oportunidades. La crisis económica del país llega hasta nuestros pueblos y, por ello, muchas niñas abandonan la escuela y, tiempo después, se ven forzadas a unirse con gente mayor”.

Para informarse a mayor profundidad de las causas y los efectos de las uniones tempranas forzadas para las niñas y adolescentes en el país, visite: www.planinternational.org.pe/futuroparaellas

Diario El Regional de Piura
 

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