ERP. La Dirección Regional de Salud (Diresa) garantizó la atención médica en los albergues que hasta la fecha vienen funcionando en Castilla y Piura donde, desde hace dos días, están refugiadas cerca de cuatro mil personas cuyas viviendas colapsaron a raíz de las lluvias y del reciente desborde del río Piura. Es una situación de emergencia que implica controlar las consecuencias sanitarias.
"Estamos haciendo todos los esfuerzos para que las familias albergadas tenga la atención médica requerida. Es por ello que los centros de salud atienden sin interrupción, con el personal requerido y en forma gratuita", señaló César Morón Pastor, titular regional de Salud.
Previamente la Diresa fumigó las instituciones educativas donde se han establecido los albergues como son: Miguel Cortés y José Carlos Mariategui en Castilla, y Jorge Basadre en el distrito Veintiséis de Octubre.
Teresmila Aguilar, la coordinadora del sector Salud en el tema de albergues, quien visita diariamente estos centros de refugio, señaló también que el objetivo es asegurar que las familias cuenten con disposición de agua segura, ingieran alimentos en buen estado y tengan servicios higiénicos adecuados.
"Las familias refugiadas muchas veces se exponen a una serie de enfermedades. Por ello trabajamos para que esto no ocurra. El monitoreo en estos centros es diario y constante", señaló.
Teresmila Aguilar resaltó que hay instituciones particulares que por su voluntad han acogido varias familias afectadas como es el caso de la Iglesia del Nazareno, ubicada en la cuadra 20 de la Av. Progreso en Castilla, donde han albergado a 40 personas damnificadas de Nuevo Catacaos, Viduque, Pedregal Grande y Montesullón.
Para el caso de los colegios Miguel Cortés y José Carlos Mariátegui la atención médica estará a cargo de Cesamica; y para el Jorge Basadre, el hospital Santa Rosa. En cada uno de los albergues hay un profesional de la salud encargado.
Igualmente se trabaja en el tema de salud mental con charlas y shows de entretenimiento con el fin de llevar esparcimiento sano a las familias afectadas.
