ERP. Javier Bereche Álvarez, presidente de la Cámara de Comercio y Producción de Piura se manifestó de acuerdo con que el Estado autorice que el sector privado adquiera y distribuya vacunas contra la COVID-19 para contribuir con la contención del avance de esta pandemia, que ya ha cobrado la vida de más de 44,300 personas a nivel nacional.
Destacó que el acceso a las vacunas contra el coronavirus por parte del sector empresarial beneficiaría a los trabajadores y sus familiares directos ya que serían vacunados gratuitamente.
“Si tuviéramos acceso a comprar y distribuir vacunas podríamos vacunar, totalmente gratis, a todos nuestros trabajadores; a obreros, técnicos y empleados de todo el sector privado, así como, a sus familias”, aseguró.
“En la región Piura la planilla formal electrónica del sector privado incluye a 176,000 piuranos que podrían acceder a la vacunación sin costo alguno por medio de sus empleadores, sin contar que también se incluiría a sus familiares directos, es decir, hijos, cónyuge y padres”, informó.
Bereche Álvarez, considera que “esta iniciativa aportaría y sería un complemento importante en la estrategia de inmunidad de rebaño que el Estado peruano desea conseguir, por tanto, debería aprobarse y asegurar el trabajo conjunto entre el sector privado y el sistema de salud del Gobierno”.
“Se necesitan herramientas complementarias que coadyuven a salvar la vida de los peruanos, y no limitarnos a esperar que el Estado lo haga solo. Y si el sector privado lo puede hacer, bienvenido. Así muchos compatriotas no deberemos esperar meses para tener acceso a la vacuna”, recalcó.
“Los laboratorios en el mundo no le están vendiendo a los privados, sólo a los estados, es por esta razón que le pedimos al Estado peruano que nos facilite la compra de las vacunas”, explicó.
Hizo hincapié en que las empresas están dispuestas a apoyar en la vacunación, solo falta que el Gobierno acepte esa ayuda que redundará en beneficio de todos.
Además, resaltó que existe la disposición del empresariado de favorecer con la donación de dosis gratuitas a las pequeñas, medianas y micro empresas que no cuentan con los recursos económicos suficientes para adquirirlas.
“Por ejemplo, hay empresas dispuestas a donar una vacuna por cada tres o cuatro vacunas que adquieran. Se estima una destinación del 20% de dosis como aporte solidario”, aclaró.